Abejas obreras
J. Víctor Esteban
Tres historias. Tres edades. Tres mundos. Las relaciones personales. La soledad. Tú lugar en el mundo. El individuo. La familia. Un nexo común. Las abejas.
La relación del ser humano con la naturaleza ha evolucionado más deprisa en los últimos ciento cincuenta años que en los cuatro mil anteriores. ¿Seguro?
En cada una de las tres historias que componen el libro la autora noruega nos sitúa a cada protagonista en un momento histórico de la evolución social. El mundo pre-industrial y su curiosidad infinita, con el método científico todavía balbuceante pero en pleno desarrollo. El estudio de la naturaleza y la capacidad humana para transformarla. Con optimismo, para bien.
Maja Lunde describe con soltura las relaciones personales en la sociedad victoriana, el medio oeste norteamericano de nuestros días o la China de economía supuestamente ultra-planificada y burocráticamente milimetrada de mediados del siglo XXI. Hombres y mujeres, padres e hijos, clichés sociales y perjuicios socialmente aceptados. Del optimismo transformador del conocimiento científico, a la placidez vital del entorno controlado, ¡conocemos el mundo! ¿Y si la naturaleza se rebela y muta a una realidad que ya no controlamos?
Las abejas han sido utilizadas en la literatura para explicar, justificar y recomendar transformaciones sociales que toman la jerarquía de la Colmena como ejemplo a replicar. Estructuras jerarquizadas que garantizan el “orden social” (que concepto tan terrible, por cierto), procesos revolucionarios que rompen el “orden establecido” (Metrópolis de Fritz Lang) o la Ciencia como mecánica reguladora de la vida humana (Un mundo feliz de Huxley).
Maja Lunde describe con innegable soltura tres etapas en la historia de las abejas y su relación con la Humanidad. La utilización de las abejas desde su entorno natural, la industrialización del panal y finalmente nuestra sociedad devenida en colmena.
Hay una cierta tradición que exige que para ser intelectualmente correcto todo debe impregnarse de catastrofismo. En el futuro siempre va todo mal como si el hecho de que nosotros ya no estaremos obligue a nuestros herederos a sufrir una vida peor. ¿Es verdad?
Si quieres leer el primer capítulo pincha aquí. Historia de las Abejas.
